El formador de maquinistas Manuel González Sánchez, al que también llegó el correo con el que José Ramón Iglesias Mazaira alertaba de una señalización deficiente en la curva de Angrois (Santiago), en la que se produjo un accidente con 80 víctimas mortales en julio de 2013, ha afirmado que aceptaron "curva como animal de compañía" y tuvieron que "convivir con ella" hasta el día del siniestro.(Fuente: Xustiza de Galicia)