El sector inmobiliario español consolida su crecimiento. Así se desprende del tercer informe sobre el “Mercado residencial en España” elaborado por Servihabitat. La compraventa de viviendas confirma en 2016 su tendencia al alza, un 26%, con una estimación de 445.000 unidades vendidas al cierre de año, mientras que para 2017 la previsión de crecimiento es del 12%. No obstante estos datos muestran distintos ritmos de crecimiento según zonas. Castilla y León, Islas Baleares y País Vasco son las que más incrementan su actividad compradora. En lado contrario están Galicia, La Rioja, Extremadura y Ceuta y Melilla. El precio de la vivienda mantiene su tendencia positiva, con un incremento del 4% de media en 2016. El stock de obra nueva, por su parte, se reduce en casi un 20%, cifra que se mantendrá también en 2017. Entre los principales factores de esta reactivación del sector encontramos una mayor fluidez del crédito hipotecario, el incremento del interés inversor, la estabilización de los precios y la disminución de la tasa de desempleo. Precisamente el informe muestra un significativo aumento del número de hogares en régimen de alquiler, un volumen del 10% del total de viviendas disponibles en España. Existe una importante masa social que considera el alquiler como primera y única opción. Eso sí el precio medio, en torno a los 500 euros, varía según las comunidades – mayor en Baleares, País Vasco y Cataluña- y se dispara en ciudades grandes como Madrid y Barcelona.