"Tiempo, programación, y espacio". Así resume Iker Oroz, socio y fundador de la panadería Anik, las claves de las barras y hogazas que elabora y vende en el barrio de Mendebaldea, en Pamplona; un pan "que sienta bien" y cuya fórmula "no es nada inventado", sino que se basa en cómo "se hacía antes, siglos atrás", usando tan sólo tres ingredientes: harina, agua y sal. "Para hacer un pan como a mí me gusta necesitas tiempo, programación y espacio. Necesitas un amasado reposado y tranquilo y una larga fermentación, en la que el pan ocupa mucho volumen y necesitas mucho sitio", ha explicado en una entrevista a Europa Press Televisión.
