La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha defendido la necesidad de alcanzar un sistema que "dé estabilidad" con unos precios de la electricidad que "permitan hacer las cuentas a los inversores" y que sean, a la vez, "razonables" para los consumidores.