Unos 150.000 kilos de tomates ya van rumbo a Buñol, repartidos en siete camiones, para teñir de rojo las calles de esta localidad en su tradicional Tomatina, que se celebrará este miércoles y en la que se esperan 22.000 asistentes. Los tomates han sido producidos este año en Frutas y Verduras Massanassa, donde llevan desde finales de abril planificando su producción, que será la munición de esta festividad. El concejal de la Tomatina de Buñol, Sergio Galarza, ha asegurado que esperan para mañana un "lleno total" de su fiesta más internacional.